Expedición de JBL a Venezuela 2016

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Nunca antes en ninguna de las 12 expediciones anteriores de JBL estuvimos tan cerca de tener que cancelarlo todo. Venezuela se sumerge en el caos; la ciudad Maturín, a la que iríamos en nuestro viaje, está considerada como la cuarta ciudad más peligrosa del mundo, ¡y encima aparece el virus del Zika! Por eso, algunos de los participantes cancelaron su viaje después de que nosotros les hubiéramos concedido la plaza. Tras conversar con nuestros organizadores locales pudimos poner en conocimiento que, debido a la ruta del viaje y al tamaño del grupo, no estaríamos en peligro. Así que dejamos apuntarse a otros interesados que estaban en la lista de espera, y el 6 de abril de 2016 el grupo de 50 personas se fue vía Caracas y Maturín hasta el delta del Orinoco, el segundo río más grande de Sudamérica con una longitud de más de 2.000 km. Aunque los participantes ya llevaban 24 horas sin descansar, a ninguno les dejó frío la última parte del viaje. Por la noche, bajo un increíble cielo estrellado, fuimos en barcas a través de la jungla hasta el Orinoco Eco Lodge, construido sobre postes en la ribera pantanosa de un afluente del delta. Este hotel de primera categoría disponía de algunas hamacas y techos de palmera con colchones debajo de mosquiteras. Pero no había ni puertas, ni ventanas. Justo lo ideal para este grupo de expedicionarios locos por la naturaleza procedentes de muchos países europeos.

Nuestro plan para los miembros de la expedición preveía que se formaran seis grupos pequeños, que irían en barca a diversos lugares donde harían snorkel, observarían y registrarían datos de biotopo. Durante tres días irían rotando, para que cada uno hubiera estado en todos los lugares. Solo por la mañana y por la noche se veía el grupo entero a la hora de comer y durante las ponencias que dieron el Dr. Wolfgang Staeck y Andreas Tanke.

El delta del Orinoco

    El angosto río de la jungla

    En la mayoría de ríos se puede navegar bien en barca, pero este río en concreto se estrecha cada vez más y está cubierto por la selva tropical como si fuera un techo. Un río de aguas blancas del Orinoco con poca visibilidad.

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    El banco de arena de las anacondas

    Nuestro guía Antonio nos contó de forma muy expresiva su lucha con una anaconda grande. Visitamos el lugar exacto donde, según su descripción, tuvo lugar esta lucha.

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    El campamento de los nenúfares

    Agua clara: los indios no nos entendieron bien. Cambiamos la estrategia y preguntamos por lugares en los que se pudieran encontrar plantas acuáticas.

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    El paseo por la jungla hasta las serpientes venenosas

    Alrededor del Orinoco Eco Lodge no había casi ningún turista. Solo se veían aisladas las casas de los indios construidas también sobre postes en la ribera del río. Gracias a nuestro guía, que tenía amistad con la mayoría de las familias, pudimos visitar a los indios.

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    Las aldeas de los indios

    Alrededor del Orinoco Eco Lodge no había casi ningún turista. Solo se veían aisladas las casas de los indios construidas también sobre postes en la ribera del río. Gracias a nuestro guía, que tenía amistad con la mayoría de las familias, pudimos visitar a los indios.

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    El entorno de nuestro alojamiento Orinoco Eco Lodge

    Pudimos utilizar canoas y kayaks para explorar silenciosamente el entorno y también los ríos más pequeños. Esta forma exploración individual gustó mucho e hizo posible con frecuencia acercarse a animales como monos o aves.

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    La gran biodiversidad del abrevadero y el sendero lodoso

    Un indio señaló una charca pequeña situada detrás de su vivienda que servía de abrevadero para el ganado, y nos contó acerca de un estanque pequeño en el que mejor no habría que meterse por las anguilas eléctricas que allí viven. Eso despertó nuestro interés.

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    Continuación del viaje a los tepuyes en el sur de Venezuela

    Por la mañana temprano en la oscuridad abandonamos el Orinoco Eco Lodge y fuimos en barca y autobús a Ciudad Bolívar. Desde allí volamos en pequeños aviones de 6 plazas unos 400 km en dirección al sur hasta Canaima.

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    La Laguna de Canaima

    Al pie de tres cascadas se extiende la Laguna de Canaima. El primer vistazo al agua de la laguna ya nos mostró unas aguas negras transparentes. A partir de ahora se podría hacer snorkel y observar bajo el agua de forma intensiva.

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    Dar de comer bajo el agua

    Además de observar las especies de peces que había, una de las cosas más impresionantes fueron las pruebas de alimentación bajo el agua. Los peces se precipitaban ansiosos sobre las barras de JBL PlanktonPur y las escamas de JBL Gala que se les ofrecía.

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    Atravesando rápidos hasta la isla La Orquídea

    Con barcas fuimos río arriba por el río Carrao. Una de las cosas más interesantes fue un afluente de apenas un metro de profundidad que tenía un agua relativamente clara, pudiéndose observar bastante bien a los peces.

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    Finalmente las ranas dardo

    El último día de expedición descubrimos también por fin sapitos mineros. El suelo del bosque no solo es marrón, sino que también hay esparcidos hojas amarillas y frutos de colores, formando así una mezcla colorida.

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    Valores medidos en el ámbito del terrario

    Empleando registradores de datos, solarímetros, higrómetros y termómetros, así como un luxómetro, pudimos registrar todos los parámetros de los diversos hábitats. Muchos se sorprendieron de que la selva tropical con frecuencia fuera mucho más seca de lo que cabía esperar.

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    Valores medidos en agua dulce

    Los tests para el agua, el medidor de conductividad, el termómetro y el luxómetro con sensor impermeable nos permitieron efectuar análisis detallados de los biotopos de las aguas. Debido a la intensa coloración propia del agua, fue imprescindible utilizar el sistema comparador de los tests para el agua de JBL.

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Notificaciones PUSH (emergentes) de JBL

¿Qué son las notificaciones PUSH? Como parte del estándar W3C, las notificaciones de escritorio definen una API para las notificaciones destinadas a los usuarios finales, que serán enviadas por medio de notificaciones al navegador del equipo de sobremesa y/o dispositivo móvil del usuario. Las notificaciones aparecen en los terminales de la forma que el usuario final conoce por las app instaladas en el dispositivo (p. ej., correos electrónicos). Las notificaciones aparecen en los terminales de la forma que el usuario final conoce por las app instaladas en el dispositivo (p. ej., correos electrónicos).

Estas notificaciones permiten al propietario de una página web ponerse en contacto con sus usuarios siempre que estos tengan un navegador abierto, independientemente de si el usuario está visitando la página web en ese momento o no.

Para poder enviar notificaciones de escritorio solo se necesita una página web con un código web push instalado. Así, las marcas que no tengan app también pueden beneficiarse de las muchas ventajas que ofrecen las notificaciones emergentes (también denominadas push, comunicaciones personalizadas en tiempo real justo en el momento adecuado).

Las notificaciones de escritorio son parte del estándar W3C y definen una API para las notificaciones destinadas a los usuarios finales. Una notificación permite notificar al usuario sobre un suceso como, p. ej., un artículo nuevo en un blog, fuera del contexto de una página web.

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